Senador Larrain, anunció gestiones ante el ministro Carlos Furche para buscar una salida al tema que tiene agobiados a cientos de productores en la zona y el país.
Una reunión con pequeños productores de trigo de la comuna de Longaví sostuvo el senador por el Maule Sur Hernán Larraín acompañado por el consejero regional Cristián Menchaca y el concejal de dicha comuna Robin Araya, debido a la incertidumbre que viven los agricultores que se han visto golpeados por el bajo precio que está experimentando el cereal en nuestro país.
El parlamentario se comprometió a efectuar gestiones ante el ministro de Agricultura Carlos Furche, pues la situación es realmente preocupante y amenaza con un gran perjuicio a todos los trigueros del país que se concentran en la zona central y masivamente en la novena región.
“Realizaremos gestiones con el ministro de Agricultura para saber la razón de qué podría explicar esta situación. Si ha habido o no importaciones de trigo desde Argentina, si ha llegado trigo partido que es una manera desleal de competir, y al mismo tiempo que Cotrisa, que es el estamento que puede regular el precio abriendo un poder comprador desde el estado, ha intervenido porque esto es esencial para que los precios siempre estén a la altura del valor de mercado y no artificialmente reducido por acciones de otros países que quieren interferir y causarnos daño”, explicó el parlamentario.
La situación es desesperante, porque los productores no ven una salida muy fácil al tema como lo explica el campesino Carlos Cabello de Longaví.
“En estos momentos estamos compitiendo con un trigo demasiado barato por lo que no es rentable para nosotros vender lo que tenemos y además hay muy poco donde entregar, porque los molineros no pagan más. La única solución que vemos es parar la llegada del trigo del extranjero”, acotó.
Por su parte, el agricultor Herman Parada culpó directamente a la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA) que depende del gobierno de turno, porque “es un departamento que tiene el gobierno donde debiera estar todo controlado a nivel mundial y que realmente funciones con el cien por ciento de los agricultores con información directa y no a través de la computación, porque la mayoría de los pequeños agricultores no maneja este tipo de tecnología. Siempre nos ahogamos a ultima hora y nosotros los agricultores perdimos ante los molineros y las panaderías que tienen grandes ganancias”.
Quien recibió directamente las quejas de los productores del cereal fue el consejero regional longaviano Cristian Menchaca, el que apuntó sus descargos al gobierno “porque estamos ante una crisis del trigo donde le han cerrado las puertas a los agricultores. Este gobierno una vez más ha demostrado su incapacidad de gobernar. Sólo han aprendido a hacer política, lo que a la gente del campo no le interesa. Aquí la gente del campo no nos dedicamos a la política nos dedicamos a trabajar en las cosas que nos han enseñado nuestros padres. Yo
soy un hombre de campo, vinculado al mundo público y a la política, pero soy agricultor antes que nada”, apuntó.